Invasión de sargazo en las playas dominicanas
NR: Ante todo aclarar que el sargazo es un conjunto o grupo de algas que tiene una función ecológica para algunos animales como la tortuga boba y algunos peces, pero que a la vez puede producir infecciones en los humanos por contacto directo. Su crecimiento y extensión es causado por la aparición de nutrientes en el mar y su desarrollo es muy rápido. Al igual que su olor es fuerte y desagradable para los turistas, también su uso de fertilizante es muy eficaz.
Una cantidad sin precedente de sargazo ha invadido este verano parte de las playas de arena blanca y agua cristalina de República Dominicana, en pleno proceso de recuperación del turismo. “Este año se ha desbordado. La realidad es que eso degrada tu capacidad de promocionar el destino”, dijo durante una entrevista la viceministra de Turismo, Jacqueline Mora, en referencia al alto volumen de sargazo que llega al país, consigna Diario Libre.
Ernesto Veloz, presidente de La Asociación de Hoteles del Este (Asoleste), dijo la última semana ha sido complicada, debido a la gran cantidad de algas en las zonas de Bávaro, Uvero Alto y en ocasiones, Bayahíbe, según Diario Libre.
El directivo afirmó que no se han registrado cancelaciones de reserva por esta causa, en momentos en que los hoteles de República Dominicana –y particularmente los de la zona de Punta Cana- están en plena actividad, con una ocupación de más de 75% y aforos autorizados ya hasta 85%.
En playas de la costa sur y del norte del país ha llegado una considerable cantidad de sargazo, incluso, a lugares donde nunca antes había llegado, según informó José Ramón Reyes, viceministro de Recursos Costeros y Marinos del Ministerio de Medio Ambiente.
“Es el año que más sargazo ha llegado y a zonas donde nunca había llegado”, afirmó Reyes, que expresó “la gran preocupación” que tienen en el Ministerio.
Impacto incierto
Desde hace semanas, el alga que se origina en el Mar de los Sargazos, una región del Atlántico al este de Estados Unidos, se ha ido extendiendo por las costas del país, incluyendo lugares donde no es habitual.
Con rastrillos en mano, decenas de hombres trabajan bajo el inclemente sol caribeño en la playa del Cortecito, en Punta Cana, en la recolección de sargazo, que “ha llegado de repente y en cantidades nunca vistas”, dijo a Efe uno de los obreros contratados por hoteles para cargar en carretillas las algas que quedan depositadas sobre la arena.
El fenómeno, que afecta las playas caribeñas especialmente en verano, sucede en momentos en los que el turismo vuelve a reflotar en República Dominicana tras la pandemia.
El país recibió entre enero y julio 2,4 millones de turistas, una cifra superior a todos los visitantes de 2020, cuando el turismo mundial se detuvo a causa del coronavirus.
El sargazo “empezó a venir de manera muy racional, suave, era manejable, pero últimamente hemos tenido una andanada importante de sargazo, que realmente nos ha perjudicado”, dijo a Efe el presidente de la Asociación de Hoteles del Este (Asoleste), Ernesto Veloz, si bien aclaró que no ha habido cancelación de reservas por esto.
Marcelo Vargas, un turoperador de la zona y responsable del Grupo de Monitoreo del Sargazo en Bávaro/Punta Cana, aseguró que la situación ya empieza a tener consecuencias, al punto de provocar cambios en los planes de muchos turistas.
“En esta zona es difícil sacar excursiones. El cliente llega y dice- mira, el agua está sucia, no quiero hacer esa excursión y la cancela” o, en los mejores de los casos, decide cambiar el destino, afirmó Vargas, durante un recorrido por la playa de Bibijagua, en Bávaro.
De hecho, aseguró, la preocupación por el tema provocó una subida considerable de miembros del grupo de monitoreo que dirige, que ya supera los 6.200, la mayoría de los cuales se sumó en los últimos meses para intercambiar opiniones sobre el tema o pedir información sobre el estado actual de las playas.
Barrera de US$ 11 millones
Varios hoteles de la zona ya cuentan con barreras antisargazo temporales, pero según dijo un hotelero a Efe, algunas de ellas se rompieron hace unas semanas con el paso de la tormenta Grace, arrojando grandes cantidades de algas a la playa.
Los hoteleros están a la espera de la instalación de una barrera fija, en un proyecto financiado a partes iguales entre el Estado y el sector privado, que saldrá a licitación en las próximas semanas.
Esa barrera es fruto de un acuerdo firmado en noviembre pasado por el Ministerio de Turismo y la Asociación Nacional de Hoteles y Restaurantes (Asonahores), que supuso la creación de un fondo de US$ 11,8 millones para mitigar y manejar el sargazo en los próximos cinco años.
Estos recursos serán exclusivamente usados para el pago del servicio de suministro e instalación de 31,5 kilómetros lineales de barreras o soluciones similares en las playas de las zonas de Punta Cana, Bávaro, Cabeza de Toro, Arena Blanca y Uvero Alto, todas en el este, el principal destino turístico del país.