Las autoridades estadounidenses lograron dar con un coleccionista que se lo llevó en un recipiente de plástico ocultándolo en un carrito de bebé
El Acuario de San Antonio, en Texas, ha recuperado a Helen, una cría de tiburón robado a plena luz del día, por tres ladrones que la metieron en una caja de plástico y la sacaron en un carrito de bebé. La policía siguió la pista a los sospechosos que fueron grabados por las cámaras de seguridad. Un coleccionista de animales confesó el robo cuando las autoridades se presentaron en su casa, donde se encontraba el escualo.
Los empleados del acuario detectaron el pasado sábado una “actividad sospechosa” de un grupo de tres individuos que se encontraban en una de las salas con tanques en los que se permite tocar a los animales. Estuvieron cerca de una hora rondando hasta que vieron la oportunidad de llevarse al tiburón.
Las cámaras de seguridad registraron el momento en el que los tres ladrones se llevan a la cría de tiburón suño cornudo de la piscina en la que era exhibido, a la vista de otros visitantes. Los hombres salieron con naturalidad del recinto con su botín y lograron fugarse en un vehículo rojo, que también fue captado en el circuito de seguridad.
El Acuario ha confirmado que Helen está a salvo. La policía llegó el lunes hasta la casa de un hombre identificado como Antone Shannon, según el diario San Antonio Express-News. Las autoridades indicaron que se trata de un coleccionista de animales de 38 años, quien confesó y fue acusado por el robo. “Tenía muchos y diversos animales marinos en su hogar; él sabía lo que estaba haciendo”, dijo a la prensa el jefe de policía de Leon Valley, Joseph Salvaggio.
El tiburón está en buenas condiciones y ha sido devuelto al acuario, donde ha sido aislado para su observación. Durante el tiempo fuera del acuario, el animal no representó ningún peligro. Los suño cornudos son una especie costera que normalmente puede llegar a crecer hasta casi un metro de longitud y se alimenta de otros animales marinos como los crustáceos.
