El Naranjo está considerado el corazón de estas montañas, y a sus pies, en la vega de Urriellu (a 1.960 metros de altura), se encuentra el refugio J. Delgado Úbeda , bautizado en honor al montañero y arquitecto que proyectó el edificio original, en 1954 (el actual se acabó de construir en 1990). Con capacidad para 96 personas, es paso obligado de los escaladores que acuden a trepar por las paredes del Picu, única forma de alcanzar su cumbre, o para aquellos que suben a admirar la belleza calcárea de sus cuatro caras, que se pueden rodear en una bonita excursión de media jornada y dificultad asequible, partiendo desde el refugio a través de la canal de la Celada.
Hay tres rutas montañeras para alcanzar la base del Naranjo , aunque la más sencilla y directa es la que parte de la mayada de Canero, accesible en coche desde la carretera de Arenas de Cabrales a Sotres. El recorrido, siempre ascendente, se realiza por una senda bien marcada desde el collado de Pandébano (1.212 metros) y remonta unos mil metros de desnivel. En función de la forma física de cada uno, lleva entre tres y cuatro horas de caminata.
La vega de Urriello es punto de partida también para coronar otra cumbre emblemática del macizo central: Torre Cerredo (2.648 metros), la más alta de Picos de Europa.
Un restaurante en el pueblo de Bulnes (Asturias), en el macizo central de los Picos de Europa.
Desde Asturias
Los accesos principales al interior del parque nacional de los Picos de Europa (parquenacionalpicoseuropa.es) dependen del tipo de excursión que se busque. Desde Asturias se pueden realizar dos acercamientos muy diferentes. Uno sería la subida al santuario y a los lagos de Covadonga (la zona más turística). El paseo circular por los lagos Enol y Ercina y la subida al mirador de Ordiales son dos de las rutas clásicas para los visitantes que entran por aquí. La otra entrada asturiana es la que llega a Poncebos y Sotres, la más tradicional para montañeros y escaladores que suben al Picu Urriellu, y para quienes visitan Bulnes , uno de los pueblos más aislados de España (no tiene acceso rodado) hasta que en 2001 se inauguró un funicular que, en ocho minutos de trayecto, salva un desnivel de 400 metros hasta Puente Poncebos a través de las entrañas de la montaña.
Senderistas en la ruta de la garganta del Cares, entre Caín (León) y Poncebos (Asturias), en el parque nacional de los Picos de Europa.
Desde Cantabria
Por el lado de Cantabria se halla otro de los puntos más frecuentados, el teleférico de Fuente Dé. Y desde la zona de Castilla y León los visitantes buscan, sobre todo, la ruta senderista más conocida del parque, la garganta del río Cares , colgada por un desfiladero fluvial a lo largo de 12 kilómetros, entre Caín y Poncebos. Un acercamiento a las montañas apto para todos los públicos, que entra por el valle leonés de Valdeón, aunque convierte el desfiladero en una romería cada fin de semana de buen tiempo.
Vega del Ario
Para los más avezados existen infinidad de rutas, como la subida a la Vega de Ario, la senda de la Jocica o la histórica senda del Arcediano entre los valles de Sajambre y de Amieva.
El recorrido entero
El Anillo de Picos es un recorrido circular de alta montaña que enlaza los tres macizos del parque nacional, en un trekking fabuloso que salta de refugio en refugio durante 10 días . Seguramente, una de las mejores experiencias montañera de Picos de Europa.
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