Las autoridades ya han incautado varios ejemplares de esta especie de anfibios en diferentes regiones del país. El caso más reciente se registró el Villavicencio. Autoridades advirtieron que su comercialización se está dando a través de redes sociales.
Sorprendidos se declararon los funcionarios de la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Área de Manejo Especial La Macarena (Cormacarena) y la Policía Ambiental, tras encontrar en una pecera de vidrio sucia y en mala condición un extraño animal albino.
Se trataba de un ajolote (Ambystoma mexicanum), una especie de anfibio endémico del sistema lacustre (lagos) del Valle de México, más concretamente del sistema de canales de Xochimilco, el cual se encuentra catalogado como en peligro crítico de extinción en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).
La pérdida de su hábitat por factores como la contaminación del agua, la introducción de peces exóticos con los que compite o depredan, al igual que por la sobreexplotación y captura como alimento, debido sus supuestos usos medicinales no constatados, y a su alta comercialización como mascota de acuario por su llamativa forma, para muchos asociada a extraterrestres, son las principales causas de la reducción de sus poblaciones.
El hallazgo hecho por las autoridades hace unos días se produjo en el barrio La Reliquia de Villavicencio, gracias a una denuncia ciudadana que advirtió sobre la presencia de varios animales silvestres en cautiverio. En efecto, en el lugar también se encontraron un gavilán pollero, dos cernícalos americanos y un búho currucutú.
Durante el operativo fue capturado un joven de 20 años, quien fue puesto a disposición de la Fiscalía y será judicializado, entre otros delitos, por el manejo indebido de especies exóticas. Otra persona que se encontraba al interior de la casa se fugó por entre un humedal ubicado detrás del inmueble.
Además del ajolote, fueron recuperadas cuatro aves durante el operativo en Villavicencio. Foto: Cormacarena
Luego de recibir atención médica veterinaria, los animales fueron trasladados al Centro de Atención y Valoración (CAV), ubicado en el Bioparque Los Ocarros, en donde se les realizará un proceso de rehabilitación para luego, de ser posible, dejarlos libres en sus hábitat naturales.
Según las autoridades, los animales eran ofertados y comercializados ilícitamente a través de las redes sociales, lo que da cuenta de una red dedicada a este negocio.
En Medellín, a finales de enero de este año, fue recuperado otro ajolote en un operativo adelantado por la Policía Fiscal y Aduanera, y Policía Ambiental de la ciudad en la bodega de una empresa transportadora. El especímen fue hallado al interior de una nevera de icopor en una bolsa con agua. El animal, por el que pueden llagar a pagar hasta 150.000 pesos, dependiendo de su tamaño, fue enviado desde Bogotá y dejado bajo custodia del Parque Explora.
Desde la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá se informó, además, que en los primeros meses de 2019 se había registrado la incautación de otro ajolote en la capital antioqueña. Las autoridades hacen un llamado a las comunidades a seguir denunciando.
Ajolote recuperado en Medellín en enero de 2020 por la Policía. Foto: cortesía Policía.
Esta especie de anfibio es fascinante para la ciencia por su capacidad de regenerar sus tejidos. Puede alcanzar longitudes de hasta 30 centímetros, aunque su tamaño promedio es de 15 centímetros. Se les encuentra de color marrón, negro o blanco. Los albinos toman ese color por haber sido criados en cautiverio.
Se alimentan de pequeños peces, gusanos, lombrices, larvas, crustáceos o moluscos y en cautiverio de pequeños trozos de carne cruda de pavo, pollo o res. Este animal, que tiene la apariencia de un renacuajo gigante con patas y cola, puede llegar a vivir hasta 15 años, además es de gran valor para la cultura mexicana al estar asociado con la mitología azteca.
