El animal tenía 27 años, una edad que corresponde a los 70 años humanos
Inuka, el único oso polar nacido en los trópicos ha muerto este miércoles en Singapur (sureste de Asia, cinco millones de habitantes) debido a una degradación generalizada de su salud, según ha anunciado el zoológico de la capital del país, donde vivía el animal. El oso, una de las principales atracciones del zoológico, tenía 27 años, lo que equivale a los 70 años de un humano. En el ámbito natural, los osos tienen una esperanza de vida de 15 a 18 años, según informa Reuters.
“Por mucho que nos gustaría mantener a Inuka con nosotros durante el tiempo que sea posible, nuestra máxima responsabilidad es su bienestar” ha dicho Cheng Wen-Haur, un oficial del zoológico, en relación con la decisión de no reanimarlo. “La mayor bondad sería aliviarlo del prolongado sufrimiento”, había asegurado poco antes de la muerte del animal.
El establecimiento había publicado un comunicado el pasado 12 de abril en el que informaba del deterioro de la salud del mamífero. Por su edad avanzada, Inuka sufría artritis, problemas dentales e infecciones de oído. Además, The Straits Times ha informado de que las patas del animal se habían debilitado, lo que dificultaba su libertad de movimiento, ya que además pesaba más de 500 kilos.
Después de la publicación del comunicado, muchas personas protestaron, pidiendo que se permitiera a Inukavivir su modo de vida natural, fuera del zoológico. Los osos polares viven en climas fríos de países como Groenlandia, Rusia, o Canadá. “Por favor, dejen que muera de manera natural”, dijo Vanessa S.Wee en la página de Facebook del zoo. Según Reuters, más de 100 usuarios anunciaron su descontento en las redes sociales del zoológico después de conocerse el deterioro de Inuka.
Polémica por criar osos polares en los trópicos
El animal se había convertido en una de las principales atracciones de este zoológico asiático pero también en el origen de una polémica. Organizaciones de defensa de los animales instaron a los zoológicos a no acoger osos polares. Chris Draper, uno de los portavoces de Britain Born Free Foundation (la fundación de nacidos libres, en inglés), una organización con base en Reino Unido que lucha por la conservación de los animales, ha criticado que “además del desafío adicional de un clima cálido, queda claro que las necesidades del animal están siendo completamente ignoradas a favor del deseo de exhibir”.
En 2006, dos años después de que el pelaje del animal había empezado a teñirse de verde al igual que el de su madre, el zoológico anunció que ya no iba a llevar osos polares a sus instalaciones. El archipiélago de Singapur se ubica cerca del Ecuador, donde las temperaturas raramente bajan de los 25 grados.
Inuka, que en inuit significa “fuerza premonitoria”, nació el 26 de diciembre de 1990. Era hijo de Nanook, un oso capturado en Canadá, y Sheeba, una osa proveniente de un zoológico de Alemania. Ambos habían llegado al parque asiático en 1978.
La muerte del oso polar Inuka pone fin a una era en el zoológico de Singapur: la dirección ha anunciado que no será remplazado y por lo tanto no habrá más osos polares.
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