Habitaciones inteligentes, nuevo reto del sector hotelero
Eficiencia energética, confort e innovaciones como habitaciones en modo noche, algunas de las ventajas de hacer que la estancia en un hotel sea smart
Ubicado en el Geoparque de la Cataluña Central, Mas de la Sala es un hotel de cuatro estrellas con restaurante de cocina tradicional. Un complejo rodeado de campo de secano y de los viñedos de la Denominación de Origen Pla de Bages, donde se ha iniciado un importante proyecto de automatización.
El objetivo es que, igual que territorio, gastronomía y vino van de la mano en este privilegiado entorno, también lo haga la tecnología. Así, en este ambiente rústico, que inspira calma y tranquilidad, ahora se pueden encontrar en algunas de sus habitaciones las últimas innovaciones de Loxone, fabricante de soluciones completas para automatizar edificios y viviendas. El proyecto, que se adapta a las valoraciones y requerimientos del hotel, ofrece una mejor experiencia a sus clientes, que pueden sentir de primera mano el placer de dormir en una habitación inteligente y automatizada.
Habitaciones inteligentes
En la primera fase del proyecto se han remodelado por completo dos habitaciones: una de las suites principales y una habitación doble estándar. Se trata de una tecnología que no es exclusiva de las habitaciones de lujo. Los beneficios que aporta son perfectamente adaptables en habitaciones funcionales donde se busca confort y bienestar para los clientes, y para los propietarios del hotel, ahorro energético y eficiencia.
Un objetivo común para los huéspedes, los propietarios del hotel y Loxone es la facilidad de control de esta tecnología. Es por ello por lo que las habitaciones inteligentes del Mas de la Sala tienen un principio básico: la automatización. Los huéspedes no necesitan tocar nada, ya que los sensores y detectores conocen el estado y activan/desactivan todo lo necesario.
Las persianas funcionan con sombreado automático. En el momento en que entra el sol, si es verano y se está sobrecalentando la habitación, se bajan automáticamente. Y en cuanto no incide el sol en el interior, se suben también automáticamente. Esto representa una reducción importante en el gasto energético de la habitación, ya que no obliga a activar el aire acondicionado o la calefacción a más potencia.
La iluminación se enciende al paso del cliente y se apaga transcurrido el tiempo necesario (sin apagarse cuando aún el huésped aún está en la estancia, un error común de muchos detectores de movimiento y presencia).
El control de la temperatura es otro aspecto fundamental en un proyecto de automatización. Si la habitación está reservada, el sistema de climatización se activa automáticamente con la temperatura objetivo. Si no hay nadie físicamente en la habitación, pero la habitación está reservada, no se apaga por completo, sino que se cambia a temperatura de ahorro. Si la habitación no está reservada, la climatización se apaga, evitando descuidos y gastos innecesarios.
Otro must es el audio integrado con Función de bienvenida al huésped, activación de la música en el baño y elección de la música a través de pulsadores acorde con los diferentes ambientes de iluminación.
¿Y qué pasa si el cliente quiere tomar el control? Si se precisa cambiar de ambiente de iluminación, subir o bajar las persianas de forma manual o gestionar el audio, los pulsadores Loxone Touch están siempre en el rincón perfecto de la habitación. Especialmente destaca el pulsador Loxone Touch Surface, que puede integrarse debajo de superficies de madera, vidrio, cerámica o piedra pasando casi inadvertido, y el pulsador Touch Nightlight, que dispone también de luz de mesa y despertador.
Eficiencia energética
Añadir Loxone como sistema de automatización en un hotel está también estrechamente relacionado con la eficiencia energética. Controlar el sistema de climatización (una de las partidas que más gasto energético supone), automatizar persianas, así como la iluminación y los accesos, facilita gestionar siempre las funciones necesarias para no incurrir en sobrecostes energéticos.
La gestión de la temperatura puede realizarse de forma exhaustiva según reservas. Además, si no hay nadie en la habitación, se regula la temperatura automáticamente. La iluminación se apaga de forma automática en las áreas que no hay nadie, especialmente cuando los clientes no están en la habitación, sin depender de que hayan podido dejar algún objeto en el tarjetero, simulando su presencia. Cuando se abren las ventanas, si la calefacción o el aire acondicionado están activados, se regula automáticamente la temperatura.
Por otro lado, la automatización de las persianas facilita activar el sombreado automático en verano, evitando que entre el sol en la estancia y suba la temperatura desmesuradamente, necesitando después activar el aire acondicionado a mayor potencia. Igualmente, en invierno facilita que el sol pueda dar soporte al sistema de calefacción en las horas punta.
El mejor confort: modo noche
La rehabilitación de las habitaciones ha venido acompañada de un incremento del confort para los clientes. La automatización mejora la experiencia en la estancia, combinando ambientes de iluminación, especialmente en la suite, donde se pueden combinar los colores de la habitación con los de la bañera de hidromasaje, viviendo momentos únicos.
Una característica especial de las habitaciones inteligentes del Mas de la Sala es el Modo noche. Cuando el cliente va a dormir, simplemente debe pulsar un botón y las persianas bajan automáticamente, todas las luces se apagan (evitando la situación recurrente e incómoda de volver a levantarse para apagar alguna luz que se ha quedado encendida) y se regula la temperatura. Si por la noche se levanta, se activará una tenue iluminación azul que permite ver perfectamente el camino sin molestar.