Cazadores furtivos matan a la única jirafa blanca de Kenia y a su cría
Cazadores furtivos mataron a la única jirafa blanca de Kenia y su cría, cuya singularidad causó sensación a nivel mundial cuando fueron vistas por primera vez en 2017, informaron los responsables de la reserva de Ishaqbini Hirola. El gerente de la reserva (ubicada en el condado de Garissa, este de Kenia), Mohammed Ahmednoor, afirmó en un comunicado que guardabosques y residentes locales hallaron los esqueletos de los animales tras una larga búsqueda.
“Las encontramos en un estado esquelético después de ser asesinadas por cazadores furtivos armados en una conservación de la naturaleza en Ijara, al noreste de Kenia, probablemente hace cuatro meses. Se cree que una tercera jirafa blanca, la joven cría macho de la hembra muerta, sigue viva”, aclaró la entidad en el comunicado.
Ahmednoor explicó que la muerte de las jirafas supone “un golpe a los pasos dados por la comunidad para conservar especies excepcionales y únicas, y una llamada de atención para un apoyo continuo a los esfuerzos de conservación”.
El nacimiento de la cría blanca, que era un macho, en agosto pasado dio como resultado la única familia de tres jirafas de ese color conocidas en el país africano, de modo que ahora solo queda un ejemplar “solitario”, dijo Ahmednoor.
Se conoció de la existencia de estos tres ejemplares en 2017, luego de que unos guardabosques los encontraron mientras patrullaban en la zona de conservación. Para ese entonces, los integrantes de la organización publicaron un video en Youtube en el que contaban la noticia. Sin embargo, los habitantes del sector se mostraron preocupados, argumentaron que esta “fama” podría poner a los individuos en el ojo de los cazadores.
Estas jirafas carecen de los colores propios de la especie debido a unacondición genética conocida como leucismo, que hace que la pigmentación de las células de la piel sea menor, si bien no se trata de albinismo. El Servicio de Conservación de la Fauna de Kenia (KWS) señaló que está investigado las muertes de las dos jirafas, cuyos restos tienen cuatro meses.