¡Veámoslo en unos días!
Quizás puede darse una confusión en el término de “verde” asociándolo solo a
paisajes precisamente verdosos, pero sin embargo esta denominación pionera en
la década de los 80 y 90, fue la antecesora de la mas actual “eco” o “ecológica”, mucho más imprecisa y demasiado manipulada comercial y
socialmente.
En general en turismo, podemos afirmar que la oferta y productos se construyen en
funciona de la demanda, respondiendo a las motivaciones y expectativas de los
diferentes segmentos, asegurando así el éxito en los resultados.
Pero si hablamos de territorios, que en definitiva son la base de los destinos,
tanto en su componente física, como humana-emocional, habría que sumar también
poder satisfacer no solo a la demanda sino a estos territorios y por tanto tener
en cuenta la premisa de la conservación del medio natural y rural, social y
cultural, pero a la vez que se genere un desarrollo económico suficiente como
para dar una alternativa de vida con calidad suficiente.
Si queremos hablar de esto, necesariamente debemos incorporar el turismo como
desarrollo sostenible y obviamente competitivo, ya que de otra forma, no funcionaria
y se extinguiría.
En esta época mas disruptiva que nunca, es la oportunidad para aprovechar los
cambios de las motivaciones y expectativas de un segmento de mercado, que cada
vez es más fuerte y tiene más volumen y que exige también una respuesta cada
vez mas nítida, en la forma y en el contenido. Les hablo del mercado verde, que
supone por ejemplo el 6% del mercado bursátil (2017), que se espera (2030) que
se equipare en tamaño al mercado de la salud a nivel mundial (90 billones de
dólares) o que solo si mencionamos el sector agro- orgánico supone 76.642
millones de euros, (2016), con un crecimiento generalizado exponencial.
Pues si hablamos de Destinos Competitivos, diferenciados en el valor y no por el
precio, obligatoriamente tenemos que tener en cuenta este mercado y sus
expectativas, tanto en el consumo diario, en el diseño de la cadena de valor y
producción turística, en el tema energético y en general de la gestión de
recursos limitados (Cada vez más, como el agua), pero también en las expectativas de salud y
bienestar, las cuales cada vez figuran como mas importantes en la demanda
turística (gastronomía, alimentación, ocio,…)
Es decir en esta ultima década, y la tendencia es en aumento exponencial, la
relevancia de la influencia verde en la sociedad es más que evidente y
obviamente s e traslada al mercado turístico, que sin embargo todavía lleva un
retraso muy considerable.
Consigamos un destinos turísticos donde su valor sea su elemento diferenciador y no el precio, aunque influya.
Es precisamente toda esta temática, la que se va a discutir en un próximo evento
en Madrid, el
I Think-Tank Destinos Verdes: LaDisrupcion Positiva,
donde con un nuevo formato tipo Televisión (Presencial y online), se analizara
y sobre todo se reflexionara sobre como son los destinos turísticos verdes, estando
presentes algunos casos como la Ría de Muros-Noía, el Alentejo, Fuerteventura,
etc. y cual podrá ser su evolución, precisamente aprovechando esta época tan
disruptiva en el comportamiento del consumo, el desarrollo tecnológico y la
rapidez del cambio, que exige sin duda alguna una respuesta urgente, no solo
porque la demanda lo pide, sino porque nos encontramos en una era de transformación
a nivel global, donde se demuestra más que nunca la teoría del caos, de tal
forma que todo lo que hagamos nosotros o lo que hagan otros a todos nos afecta
y claro una acción local, multiplicada por miles y miles conllevara un resultado
visible, en beneficio de todos.
Y es hora, que el turismo cumpla también su role y ayude a provocar este cambio
en el comportamiento humano, que sin duda tendrá un retorno más que apetecible.
Un saludo muy cordial y les espero en el Think Tank
Arturo Crosby
fuente:http://forumnatura