Denuncian que páramo de Sumapaz, el más grande del mundo, está en riesgo por el fracking
La Alianza Colombia Libre de Fracking, ACLF, expidió este jueves un comunicado en el que informan sobre los peligros y graves consecuencias que podría traer la técnica extractora de petróleo del fracking para los paramos de Colombia, específicamente para uno de los más importantes del país y del mundo, el de Sumapaz.
En vista de la disposición por parte del Gobierno para ejecutar los planes de fracking, para los que ya tienen dispuestos 43 bloques destinados exclusivamente para esta técnica, la ACLF advirtió de las graves consecuencias que esto puede traer para el Sumapaz, el cual es considerado como la “despensa agrícola de la capital”, y para otros como el Chingaza, que es encargado de abastecer aproximadamente el 80% del agua potable de la capital colombiana.
La alianza se expresa preocupada por la implementación de la técnica en Colombia, que a pesar de aún no haberla utilizado para extraer en ningún terreno nacional, las consecuencias y advertencias que ha dejado en el resto del mundo, son más que suficientes para prevenirse del fracking.
Rechazan además la decisión unilateral por parte del Gobierno Nacional de realizar las delimitaciones que destinarán la aplicación del fracking sin haber consultado a la comunidad ni al país en general; por esto mismo destacan cómo la comunidad de Guasca ya ha presentado denuncias advirtiendo al país lo que podría suceder si no detenemos estos programas petroleros.
La carta de la ACLF fue dirigida a Juan Manuel Santos para que evite que se concreten las ejecuciones de estas técnicas, que a pesar de aún no estar pactadas, los primeros pasos de aprobación ya están sobre la mesa a la espera de aprobaciones.
Advierten sobre las graves consecuencias que conllevará el fracking con el agua del país, destacando la importancia del preciado liquido el cual pretenden proteger, tomando como punto de referencia lo dictado por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos “EPA”, en la cual afirmó que la utilización de esta técnica extractiva podría contaminar en gran medida las aguas potables del país. Explican que lo anterior se debe a la concentración de sustancias químicas que involucran la perforación necesaria para la extracción de petróleo.
“Los millones de litros de agua que se utilizarían en esta técnica quedarían irremediablemente contaminados y sería imposible verterlos nuevamente a las fuentes hídricas, ya que no existe ningún método en el mundo que permita eliminar los agentes tóxicos y radioactivos de las aguas residuales”, expresa la misiva.
Con esto concluyen que se debe velar por evitar la experimentación con el fracking en Colombia, ya que podría causar una alarmante disminución en las reservas hídricas del país, lo que eventualmente lo podría encaminar en una catástrofe donde el flujo de agua resulte más limitado que el del mismo petróleo.