Muere Koko, la gorila que dominaba el lenguaje de signos
La primate, que ha fallecido a los 46 años, fue criada en cautiverio y había aprendido mil palabras
Koko, la gorila que se hizo famosa en el mundo entero por su dominio del lenguaje de signos, ha fallecido este miércoles a los 46 años en California, según informa la Gorilla Foundation en un comunicado. La primate, que llegó a dominar mil palabras en lenguaje de signos, se ha convertido en “un icono de la comunicación entre especies”. “La capacidad de Koko por el lenguaje y su empatía abrió la mente y el corazón de millones de personas”, ha subrayado la fundación.
La primate ha fallecido mientras dormía y su muerte ha generado miles de mensajes de condolencia en las redes sociales. Por ejemplo, la actriz estadounidense Jamie Lee Curtis ha publicado el siguiente tuit: “Jamie triste. Mundo triste. Koko héroe”.
La psicóloga para animales Francine Penny Patterson se encargó de Koko cuando solo era un bebé. Por aquel entonces, Patterson trabajaba en un proyecto científico sobre el lenguaje de signos. La científica y Koko pasaban muchas horas juntos cada día y se hicieron inseparables. Ella, aparte de alimentarle con biberones, comenzó a enseñarle lenguaje de signos con la ayuda de una intérprete para sordos.
En tan solo dos años, Koko ya había aprendido 80 palabras. En 1974 la primate y Patterson se mudaron a la Universidad de Stanford. Allí la psicóloga fundó la Gorilla Foundation, una sociedad sin ánimo de lucro encargada de la protección y preservación de gorilas y otros monos mediante la comunicación entre especies y la investigación, tal como explican en su página web. Koko continuó su aprendizaje. Poco a poco, fue ganando fama en todo el mundo y apareciendo en numerosos reportajes. En al menos dos ocasiones, apareció en la portada de la revista National Geographic.
La fama le llevó a conocer a varios músicos y actores. En 2016, la organización Gorilla Foundation publicó en su cuenta de Facebook un vídeo de Koko tocando el bajo junto a Flea, bajista del grupo Red Hot Chili Peppers. Más de una década antes, en 2001 tuvo una reunión con el actor Robin Williams. Un vídeo de su encuentro, que se hizo viral, muestra como se hacen cosquillas uno al otro y se ríen a carcajadas. Koko arrebata las gafas del actor, ya fallecido, y se las coloca. Luego le saca la billetera del bolsillo y comienza a revisarla, le pide más cosquillas y que le siga.
Williams, tras la experiencia, afirmó que habían compartido algo extraordinario: la risa. “Koko entiende el inglés hablado y usa más de mil signos para compartir sus sentimientos y pensamientos sobre eventos cotidianos: la vida, el amor, incluso la muerte. Fue increíble e inolvidable”, contó el comediante que falleció en 2014.