Una joven ha diseñado un adoquín ecológico que está elaborado con desechos de plástico.
Saif Eddine Laalej tiene apenas 20 años y ya ha descubierto la manera de convertir el plástico desechado en un material de construcción útil.
Este joven estudiante de la Escuela Nacional de Negocios y Administración de Tánger, en el norte de Marruecos, ha diseñado un adoquín ecológico que está elaborado con desechos de plástico.
El producto final es una mezcla de plástico reciclado y otros componentes, especialmente cemento y arena. Este adoquín, llamado Paveco, se puede utilizar como pavimento y ofrece las mismas ventajas que el hormigón. Además, tiene un impacto positivo en el medioambiente. Estas son las características que Laalej y su socio, Houda Mirouche, buscaban cuando cofundaron Zelij Invent.
Se utilizan 35 kilogramos de plástico por cada metro cuadrado de adoquín.
El equipo ha estado desarrollando su innovador producto desde 2016, gracias a un programa de emprendimiento social estudiantil y desarrollo sostenible dirigido por la ONG Enactus.
Esto representa una solución probada para el reciclaje de plástico y se ajusta perfectamente a los estándares actuales de la industria para productos de pavimentación.
“Esto representa una solución probada para el reciclaje de plástico y se ajusta perfectamente a los estándares actuales de la industria para productos de pavimentación”, dice Laalej.
De momento, el taller de Zelij Invent solo produce prototipos y productos de muestra, pero la start-up estima su potencial para reciclar plástico en 2.520 toneladas métricas por mes, dado que se utilizan 35 kilogramos de plástico por cada metro cuadrado de adoquín.
