El organismo más grande del mundo está de muerte. No es una enorme ballena, tampoco un gran elefante. Y no muere por enfermedad ni por vejez: muere a mordiscos.
Es Pando, el mayor organismo del planeta y tal vez el más viejo, que está siendo destruido por voraces ciervos mula.
Pando es una colonia de álamos que se extiende por 43 hectáreas en Utah, Estados Unidos. No es un bosque de álamos: es un solo álamo, pues es una colonia clonal en la que cada individuo es copia del otro y están enlazados por la raíz. Es una selva de un solo árbol.
Los ciervos están comiendo los brotes que nacen, de modo que no existe una regeneración, no se remplaza a sí mismo, de acuerdo con Paul Rogers, ecólogo de Utah State University.
Algunos estiman que Pando tiene al menos 80.000 años de edad, aunque no ha sido fácil establecer su edad.
Los ciervos y en ocasiones el ganado están devorando los brotes antes de lograr la madurez.
Es como tener una comunidad de 50.000 personas, todas mayores de 80 años: no es una comunidad sostenible, explicó Rogers a Live Science.
Los tallos más nuevos tienen entre 110 y 130 años. El suelo de ese bosque está cubierto con árboles muertos. No hay renovación.
La alta presencia de ciervos se debe a los humanos: eliminaron sus depredadores. Y así Pando es como una enorme ensalada a merced de estos herbívoros.
Para Rogers y quienes defienden a Pando, la solución está en cercar mejor las yemas que brotan, a la vez que permitir la presencia de cazadores expertos (la caza allí no está autorizada por tener áreas residenciales cercanas).
No está claro el futuro del mayor organismo del planeta.