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Presos en Colombia abren tienda para el turismo cafetero

El Viceministerio de Turismo de Colombia está impulsando la visitación y el consumo en la recién inaugurada “Tienda Turística” de la cárcel de Calarcá, un emprendimiento público-privado que busca dar una segunda oportunidad a los reclusos, a partir del turismo cafetero. Además de vender los productos de elaboración propia, tendrá una cafetería con panadería artesanal.

El turismo sigue mostrando que puede ser una de las actividades ideales para el desarrollo de una economía de triple impacto, es decir, que genere rentabilidad a quien emprenda pero, al mismo tiempo, otorgue beneficios al cuidado del ambiente y a las comunidades en las que se desarrolla.

En ese marco, el Gobierno colombiano está apoyando y difundiendo una iniciativa que busca dar una segunda oportunidad las personas privadas de su libertad en el corazón del país, a través del cada vez más demandado turismo cafetero.

El turismo cafetero puede ser una segunda oportunidad para muchas personas privadas de la libertad en Colombia

Esta semana, el viceministro de Turismo de Colombia, Ricardo Galindo Bueno, participó de la inauguración de la “Tienda Turística” de la cárcel de Calarcá, en el departamento del Quindío, en el corazón del Eje Cafetero, donde los reclusos pueden comercializar las artesanías y el café certificado que ellos mismos producen.

En efecto, el funcionario señaló que este espacio es el fruto del trabajo que se viene realizando en este centro carcelario para generar nuevas oportunidades económicas a los presos. Y, en ese marco, invitó a los turistas colombianos a que incluyan este “atractivo” en sus trayectos por la región y que apoyen la iniciativa consumiendo esos productos y conociendo el proceso de elaboración.

La nueva “Tienda Turística” de la cárcel de Calarcá venderá artesanías y café certificado de producción propia, además de contar con una cafetería

Pero, además, contará con una cafetería, por lo que varios de ellos tendrán la oportunidad de capacitarse y desempeñarse como panaderos y baristas. En total, habrá unos 30 reclusos dedicados a todas las tareas vinculadas, desde el cultivo del café hasta la atención al público.

“Este lugar tiene todo el potencial para convertirse en una parada obligatoria de los turistas y, desde el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo (Mincetur), trabajaremos por fortalecerlo e incluirlo dentro de los circuitos que construimos constantemente”, aseguró Galindo Bueno.

Finalmente, la cartera destacó a través de un comunicado que la iniciativa tiene un valor adicional, porque surge de un esfuerzo público y privado, ya que es apoyada por la Federación Nacional de Cafeteros; el Ministerio de Justicia; el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec); y cuenta con financiamiento de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudc), provenientes del Programa Global de Doha y el Estado de Qatar.

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